Es una de las principales escuelas de ballet clásico del mundo y es la escuela asociada a “Teatro alla Scalla”. Dicho teatro fue fundado, bajo el auspicio de la emperatriz María Teresa de Austria, en sustitución del Real Teatro Ducal, el cual fue destruido por un incendio el 26 de febrero 1776 y hasta entonces había sido el hogar de la ópera en Milán. El Teatro alla Scala se inauguró el 3 de agosto 1778.
Luego, en 1813, el teatro fundó “La Scalla Ballet School” a manos de Benedetto Ricci y cuyo objetivo era la de cultivar nuevos talentos en el área de la danza.
Muchos bailarines famosos han sido directores दे la escueला. Entre ellos, Carlo Blasis (1795 - 1878), Caterina Beretta (1839 - 1911), Olga Preobrajenska (1871 - 1962), Enrico Cecchetti (1850 - 1918), Esmée Bulnes, John Field (1921 - 1981) , Anna Maria Prina.
En 2001 la Academia del Teatro alla Scala se convirtió en una fundación privada, adquiriendo la estructura que tiene hoy con cuatro departamentos: Música, Ballet, Escenario (stage and workshops) y Gestión.
Cada año, jóvenes desde los 6 años de edad hasta los 30 van de todas partes del mundo para convertirse en figuras importantes en los ámbitos artísticos, técnicos y de gestión: cantantes de ópera, músicos de orquesta, cantantes de coro, bailarines, escenógrafos, técnicos de vestuario-cabello-maquillaje, iluminadores, tramoyistas, fotógrafos, técnicos de sonido, vídeo y managers.
El actual director del Departamento de Danza es Frédéric Olivieri. Es pues que hoy en día la escuela de ballet ofrece una formación de 8 años, la cual incluye una serie de cursos que van desde el nivel básico hasta la formación de profesionales instruidos en el método de la Escuela.
Actualidad de la Escuela Italiana
La Escuela Italiana de Ballet continúa su vigencia hoy en día gracias al trabajo de la Academia del Teatro alla Scala, al esfuerzo de los seguidores de Enricco Cecchetti, quienes al fundar la organización “Cecchetti Council of America” se han propuesto mantener los estándares y el método de formación de ballet creado por Enrico Cecchetti y al empeño que día a día los representantes de la Escuela Italiana de Ballet dedican por preservar su estética y metodología.
